Castilla y León: «¿El consumo de drogas puede abrirte la mente?»

24 de Febrero del 2010


Un catedrático responde a las preguntas de 300 jóvenes y desmitifica los efectos positivos de los estupefacientes.

Fuente: nortecastilla.es

«¿El consumo de drogas puede abrirte algunos aspectos de la mente?, ¿por qué las drogas te hacen tener más seguridad en ti mismo?...», y así hasta una batería de 27 preguntas formularon los trescientos alumnos de secundaria que ayer "hablaron de drogas" con el catedrático de Farmacología Rafael Maldonado. El experto se enfrentó a un abarrotado auditorio del palacio de congresos Conde Ansúrez, en el marco de una iniciativa de La Caixa, y contestó una a una a las cuestiones planteadas para desmitificar los supuestos efectos positivos de los estupefacientes y, de paso, alertar sobre su peligrosidad. Estás fueron sus conclusiones divididas en tres grandes bloques:

Efectos sobre el cerebro

Adicción y enfermedad

«La adicción es una enfermedad y los adictos son enfermos crónicos, y eso es algo que tiene que quedar claro, porque necesitan un tratamiento para que vuelvan a integrarse en la sociedad», explicó el catedrático, quien aclaró que el consumo abusivo de cualquier sustancia, incluso los fines de semana, puede provocar «alteraciones mentales».

El doctor Maldonado también quiso dejar claro que «el último que se da cuenta de esta enfermedad es el adicto» e hizo hincapié en la necesidad de la prevención y el apoyo del entorno para que salgan adelante. Eso además de advertir de que «ninguna droga te genera efectos similares en el cerebro al de las sustancias endógenas que genera».

El experto alertó sobre cómo el consumo habitual puede dañar el cerebro y provocar una disminución en la capacidad de memoria. Maldonado explicó, por último, cómo el uso recreativo de las drogas seguido del abuso desembocan en la adicción y en la enfermedad.

Efectos sobre el cuerpo

Muerte y capacidad sexual

La vida media -periodo en el que se elimina la mitad de lo consumido- de las drogas en el organismo va desde las dos horas de la nicotina hasta las 36 horas del cannabis pasando por las nueve del alcohol hasta las tres de la cocaína. ¿Y puedes ser mortales? La respuesta es sí. El alcohol puede provocar el fallecimiento por hipotermia o depresión respiratoria; la cocaína hace lo propio al subir la presión arterial, y las drogas de diseño (éxtasis) causa también hipotermia al subir la temperatura corporal. Pero eso ocurre en casos extremos. Sin llegar a tanto, el catedrático explicó como el consumo crónico también «tiene efectos negativos sobre la capacidad pulmonar, el hígado,..., que surgen a largo plazo y que necesitan un periodo largo de recuperación».

Rafael Maldonado quiso dejar claro, a la pregunta de un estudiante, que «ninguna sustancia externa te va a abrir ningún aspecto de la mente porque el funcionamiento natural del cerebro es la mejor manera de que funcione bien». Acto seguido también contestó sobre cómo afectan los estupefacientes a la capacidad sexual: «Hay quien dice que hay drogas que aumentan el deseo sexual pero lo cierto es que lo hacen es desinhibir al consumidor y llevarle a hacer tonterías que no haría en condiciones normales como mantener relaciones sexuales sin tomar precauciones al desaparecer su tendencia a protegerse».

Sobre el comportamiento

Seguridad o desinhibición

«¿Por qué las drogas te hacen tener más seguridad en ti mismo?», pregunta una joven. La respuesta del catedrático fue contundente: «Eso no es cierto, cuando tomas copas o consumes otras drogas no te sientes más seguro sino que te producen un efecto desinhibitorio». Los estupefacientes, prosiguió, simplemente «disminuyen el freno racional». Maldonado ahondó en este aspecto y destacó que «todos deberíamos ser siempre conscientes de lo que hacemos porque las drogas no van a favorecer nuestras relaciones sociales sino que nos llevan a desarrollar conductas que nunca hubiéramos hecho sin tomarlas».

Ruegos y preguntas

Sustancias para estudiar

Fuera de los tres bloques de preguntas, los jóvenes se interesaron por las drogas utilizadas en Estados Unidos para aumentar la capacidad de atención: metilfenidato y modafilina. «Sus efectos son similares al de las anfetaminas, puede que menores, pero no son inocuas».

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